Ahora que empiezas  la dieta… ¿Pasas hambre?

Lo primero es diferenciar el hambre del apetito.

Si tienes hambre, es una necesidad energética en la que ingerirías alimentos de forma no selectiva.

En el apetito la selección de alimentos viene condicionada por factores culturales, sociales y gustos individuales de la persona.

Desde el punto de vista fisiopatológico, sabemos que el cerebro integra señales de otros órganos que le informan de la situación de reserva energética.

Una hormona muy importante es la ghrelina que informa si el estómago esta lleno o vacío, también participan otras como la insulina o la colecisto-quinina en el envío de señales al cerebro para provocar hambre o saciedad.

Hoy en día comemos más por apetito que por hambre.

También hay que distinguir entre hambre y ansiedad.

Las personas que comen por ansiedad lo harían incluso después de haber comido recientemente y tienden a picotear continuamente.

Hay comer raciones más pequeñas pero más veces al día, no te saltes almuerzo y merienda.